miércoles, 17 de diciembre de 2014

EL TIEMPO, UN FUEGUECILLO JUGUETON

No sé si a vosotros os ocurre: historias de tu vida que cuando estaban pasando te parecían el no va más de importantes, de emocionantes, creías que te iba la felicidad en ellas, y sin embargo, pasados los meses, ni acordarte. Y por el contrario otras, chiquitas, humildes, que entonces casi pasaron desapercibidas, y que luego se han ido convirtiendo, pasito a pasito, en pilares del templo de tu memoria.
Y es que el tiempo es como un fueguecillo juguetón, que a veces te achicharra los recuerdos, y otras los va cociendo despacito, con cariño y paciencia, cocinando un guisito de esos sabrosones que el día menos pensado te encuentras servido, con el esmero de un banquete nupcial, en la mesa de gala de tu existencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario